El teatro que domina hoy es un teatro de representación, donde existen una obra y un sentido ya dados. Después viene un traductor para la escena, que sería el director, que pone en escena esas ideas con cierta lógicas y reglas. Y después aparece el actor, que interpreta, representa el sentido del texto, la historia, su carácter psicológico y expresivo. Para otra visión, lo teatral sería aquello que pone en funcionamiento un plano más totalizante y poético de los lugares hasta crear un espacio ritual donde unos cuerpos de carne se convierten en privados y públicos a la vez, para otros que miran. El relato parece dar una excusa a ese ritual primario
martes, 18 de enero de 2011
EL ESPACIO DEL ENSAYO - Ricardo Bartís
El ensayo es un territorio singularísimo y poco pensado. Sin embargo, toda la gente apasionada por el teatro reconoce que en los ensayos se ven situaciones de enorme intensidad y singularidad, con ritmos epifánicos y encadenamientos que después uno busca denodadamente que se produzcan en el espectáculo, y mucha veces no se logra. Ensayar, en el teatro y en la vida, crea una zona liberada. Pero hay un teatro que no deja abrir esa posibilidad. El ensayo acaba cuando se agota la energía... Hay un momento de agotamiento . De seguir, empezaría el remedo de una intensidad pasada. Cuando se termina de ensayar es porque se aceptaron todos los riesgos.
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